La semana pasada terminamos el artículo hablando de cómo sustituir el Mito de los Lácteos por una Realidad más acorde con la Vida. Pues bien, hoy vamos a «revelar el misterio», pero también dije que tal misterio había sido ya resuelto hace mucho tiempo, pero parece ser que todavía no ha llegado a todo el Planeta Tierra. Así que hoy vamos  a poner nuestro aporte  para que cada vez lo vaya conociendo más y más gente.

Se trata de sustituir la Leche Animal por la Leche Vegetal.  En realidad el término «Leche» sólo es aplicable a lo animal; lo que hoy día llamamos Leches Vegetales son en realidad Horchatas (sí, como la famosa Horchata de Chufa!), pero se les ha llamado Leches Vegetales porque tienen un textura y color similares a la Leche Animal y se las utiliza normalmente en sustitución de esta Leche Animal. Lo que ocurre es que hasta hace pocos años sólo existía la Leche/Horchata de Chufa,  y hoy día existe una gran variedad  de Leches/Horchatas:  de Soja, de Avena, de Almendra, de Avellana, de Trigo Sarraceno,  de Espelta, de Sésamo, etc etc, y más que en el futuro irán saliendo al mercado.

Todas estas Leches/Horchatas provienen del fruto que nos da la Tierra Madre, y no generan intolerancias ni alergias (salvo casos concretos de intolerancia específica al propio vegetal )

Son de fácil digestión, y contienen todos los nutrientes del vegetal del cual están hechos, y tienen el sabor propio de ese vegetal, al contrario de la Leche Animal que toda sabe igual. No generan colesterol porque no poseen grasas saturadas, al contrario de la Leche Animal que sí las posee.

Podemos incluso hacerlas en nuestra propia casa con simplemente tener una máquina casera adecuada para ello. Y de la de Soja se puede hacer el Tofu, que sería el equivalente al queso de leche animal.  La Soja es muy rica en proteínas.

Hay quien dice que las Leches /Horchatas vegetales no se pueden comparar con las Leches Animales, pero yo pregunto:¿en qué hay que  compararlas?  La única comparación que podríamos hacer sería la de la actitud mental receptiva o no receptiva a sacar de nuestra Mente un Mito para cambiarlo por una Realidad.

La única pregunta que sí deberíamos hacernos es: ¿Me merece la pena hacer el cambio para  beneficiar mi salud, la salud del Planeta, y el respeto a la  vida animal de no mal utilizar a los animales sin  necesidad real?

Les puedo asegurar que la respuesta es un rotundo y definitivo : SI.

Pruebe, compare….., y seguro que no encuentra algo mejor!!!!!!